jueves, 28 de mayo de 2009

MEMORIA

Desde Platón a Virilio, pasando por Nietzsche, Freud, Bergson o Bordieu se ha hablado sobre la memoria y ha sido tema de preocupación de la filosofía, la ciencia y también el arte. Grandes escritores como Cortazar o Borges tratan el tema de la memoria. 
Cineastas aclamados por el publico como Hitchcock –a quien siempre preocupó el tema de la memoria- tienen films específicos sobre el tema como lo es “Vértigo”. Otros, menos conocidos como Chris Marker hacen girar toda su obra entorno a la memoria.  «La Jetée». (1962) (de la que Terry Gillian hizo un remake bajo el título de «12 Monos».) es la historia de un hombre marcado por un recuerdo. 
Durante años la memoria había sido denostada. Como se diría en lenguaje coloquial, “la memoria era cosa de viejas o de románticos”. Con la aparición de la llamada inteligencia artificial y especialmente a partir de la invención de los ordenadores personales, la memoria ha vuelto a aparecer como tema de debate, discusión, investigación. Tema para el arte e  incluso para el ocio. Escritos clínicos sobre la memoria –hechos para el gran publico, eso sí- como “El hombre que confundió a su mujer con un sombrero” del neurólogo Oliver Sacks tienen éxito de ventas, y en su versión escénica llena las salas de teatro.  
La memoria es una preocupación actual. “¿Cuánta memoria tiene tu ordenador? ¿Y tu cámara de fotos digital?”, son frases que escuchamos hoy a diario. Pero, ¿en que se parecen y en que se diferencian la memoria informática y la memoria humana? ¿Recuerda de la misma manera un ordenador y una mente humana? ¿Es la memoria artificial más objetiva que la memoria natural?